Financiamiento vehicular con BBVA
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Si buscas cómo conseguir ese carrito que te gusta sin comprarlo de una, el leasing vehicular te va a caer de perlas. Es básicamente un alquiler con derecho a compra, o sea, lo usas y si al final te convence, te lo quedas. Y si lo que buscas es un auto con experiencia, o sea, uno usado, también existe un crédito vehicular para eso.
Los intereses suelen ser un poco más altos, pero si encuentras esa joyita que aún da batalla, ¡vamos, que es una buena movida! Tanto el leasing como el crédito para usados son dos caminos que te llevan al mismo destino: sentir el volante de tu nave en tus manos.
¿Ahorrar para comprar un auto usado?
Mira, la decisión entre ahorrar para un auto usado o meterle al financiamiento para uno nuevo depende de tu bolsillo y de lo que busques. Si el presupuesto es ajustado y necesitas un carro ya mismo, mira, optar por un usado te podría salvar la jugada. Pero si lo que quieres es oler a nuevo y tener lo último en tecnología, y además no te asustan los pagos mensuales, lanzarte a por un financiamiento puede ser tu mejor jugada. Claro, tendrás que mapear tu ruta financiera a largo plazo, porque recuerda, lo barato a veces sale caro, y lo nuevo, aunque pinta bonito, tiene su precio.
Ahora que la viste, manejar tu propio carro no es un cuento de caminos de hadas. Con la estrategia correcta y el apoyo de financiamiento adecuado, como el que te ofrece BBVA, el asiento del conductor está a solo una firma de distancia. Acomódate, ajusta los espejos y arranca hacia esa meta con nosotros.
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