Tarjetas de crédito garantizadas con cashback y beneficios adicionales

El cashback es un programa de recompensas que devuelve un porcentaje del dinero gastado en compras. En las tarjetas garantizadas, el cashback funciona de la misma manera que en las tarjetas tradicionales:

• Gastas en compras elegibles.

• Recibes un porcentaje del gasto en forma de reembolso.

• El cashback acumulado puede ser usado para pagar el saldo, canjearse por efectivo o aplicarse como crédito en la cuenta.

• Por ejemplo, si una tarjeta ofrece 1.5% de cashback y gastas S/ 1,000 al mes, recibirás S/ 15 de reembolso.

• Programas de cashback atractivos: Algunas tarjetas garantizadas ofrecen cashback competitivo, que puede variar según el tipo de compra. Por ejemplo, 3% en supermercados, 2% en restaurantes y 1% en todas las demás compras.

• Recompensas por compras: Además del cashback, algunas tarjetas garantizadas permiten acumular puntos que pueden canjearse por productos, viajes o descuentos en comercios afiliados.
• Protección contra fraudes: Muchas tarjetas garantizadas incluyen protección contra fraudes, ofreciendo seguridad adicional al realizar compras online o en establecimientos físicos.

• Acceso a herramientas de monitoreo crediticio: Los emisores de tarjetas garantizadas suelen ofrecer herramientas para monitorear tu puntaje crediticio, permitiéndote seguir de cerca tu progreso y tomar decisiones informadas.

• Posibilidad de migración a una tarjeta sin garantía: Con un uso responsable, algunas entidades permiten convertir la tarjeta garantizada en una tarjeta tradicional, devolviendo el depósito de seguridad.

En el mercado peruano, algunas tarjetas garantizadas destacan por ofrecer programas de cashback y beneficios adicionales. Antes de elegir una, considera los siguientes aspectos:

• Tasa de cashback: Revisa qué porcentaje ofrecen y en qué categorías.

• Comisiones y tasas de interés: Asegúrate de conocer todas las tarifas asociadas.

• Requisitos de depósito: El monto del depósito puede variar según el emisor.

• Beneficios adicionales: Comprueba si la tarjeta incluye otros beneficios como descuentos en comercios, seguros de viaje, o programas de recompensas.

• Usa la tarjeta para compras cotidianas: Utiliza la tarjeta para gastos regulares como combustible, supermercados o servicios, donde puedas maximizar el cashback.

• Paga el saldo completo cada mes: Evita cargos por intereses pagando el saldo completo al final de cada ciclo de facturación. De esta manera, el cashback realmente representará un ahorro.

• Aprovecha las promociones especiales: Algunas tarjetas ofrecen bonificaciones de cashback en ciertas categorías o durante promociones especiales. Mantente informado para aprovechar estas oportunidades.

• Monitorea tu gasto y recompensas: Revisa regularmente tu cuenta para asegurarte de que el cashback se esté acumulando correctamente y para mantener el control sobre tus gastos.

• Evita cargos adicionales: Evita el uso de la tarjeta para retiros en efectivo o compras en el extranjero que puedan generar comisiones adicionales.

• Gastar más solo para obtener cashback: Un error común es gastar innecesariamente para acumular más cashback. Recuerda que el objetivo principal es mejorar tu historial crediticio y administrar tus finanzas de manera responsable.

• No leer las condiciones del programa de recompensas: Cada tarjeta tiene sus propios términos y condiciones. Asegúrate de entender cómo y cuándo se aplica el cashback, y si hay límites o restricciones.

• No pagar a tiempo: Los pagos tardíos pueden generar intereses y afectar negativamente tu puntaje crediticio, anulando los beneficios del cashback.

Estas tarjetas son ideales para:

• Personas con mal historial crediticio que desean reconstruir su puntaje.

• Jóvenes o estudiantes que están comenzando a construir su historial financiero.

• Personas que desean controlar su gasto mientras obtienen beneficios adicionales.

Evalúa tu situación financiera

Antes de solicitar una tarjeta garantizada, es fundamental analizar tu situación financiera:

• Revisa tu historial crediticio: Si tienes un historial negativo, una tarjeta garantizada puede ser la mejor opción para empezar a mejorar tu puntaje.
• Establece un presupuesto: Determina cuánto dinero puedes destinar al depósito de seguridad y cómo manejarás tus pagos mensuales.

Investiga las opciones disponibles

No todas las tarjetas garantizadas ofrecen los mismos beneficios. Es importante comparar diferentes opciones para encontrar la que mejor se adapte a tus necesidades:

• Compara tasas de interés: Algunas tarjetas pueden tener tasas más bajas que otras.
• Revisa las comisiones: Asegúrate de entender si existen tarifas anuales, cargos por mantenimiento o costos adicionales.
• Verifica los beneficios: Algunas tarjetas ofrecen cashback, recompensas o herramientas de monitoreo crediticio.

Reúne los requisitos necesarios

Para solicitar una tarjeta garantizada, generalmente necesitarás cumplir con ciertos requisitos básicos:

• Documento de identidad válido (DNI, pasaporte).
• Prueba de ingresos: Aunque el depósito es una garantía, algunas instituciones pueden requerir pruebas de ingresos estables.
• Depósito de seguridad: Este monto suele ser equivalente al límite de crédito y cada banco maneja un monto distinto.
• Cuenta bancaria activa: En algunos casos, el banco requerirá que tengas una cuenta corriente o de ahorros con ellos.

Realiza la solicitud

Una vez que hayas elegido la tarjeta adecuada, puedes proceder con la solicitud:

a) Solicitud en línea

• Visita el sitio web del banco o emisor de la tarjeta.
• Llena el formulario de solicitud con tus datos personales, información financiera y detalles de contacto.
• Adjunta los documentos requeridos (identificación, comprobante de ingresos, etc.).
• Envía la solicitud y espera la confirmación.

b) Solicitud presencial

• Acude a una sucursal bancaria con los documentos necesarios.
• Habla con un asesor financiero para resolver dudas sobre la tarjeta y el proceso.
• Completa el formulario y entrega la documentación requerida.
• Realiza el depósito de seguridad directamente en la sucursal o mediante una transferencia bancaria.

Realiza el depósito de seguridad

El depósito de seguridad es el paso clave para obtener una tarjeta garantizada. Este depósito:

• Determina tu límite de crédito: Si depositas 500 soles, tu límite será de 500.
• Se mantiene bloqueado mientras uses la tarjeta, pero no se utiliza para pagar tus deudas a menos que incumplas los pagos.
• Es reembolsable si cierras la cuenta o migras a una tarjeta sin garantía tras un uso responsable.

Activa y usa la tarjeta de manera responsable

Una vez que tu solicitud haya sido aprobada y hayas recibido tu tarjeta:

• Actívala siguiendo las instrucciones proporcionadas por el banco.
• Utiliza la tarjeta regularmente para compras pequeñas y cotidianas, asegurándote de no exceder el 30% de tu límite de crédito.
• Paga tus facturas a tiempo para evitar intereses y mejorar tu puntaje crediticio.

Monitorea tu progreso

Después de varios meses de uso responsable:

• Revisa tu historial crediticio en las agencias de crédito para verificar que los pagos están siendo reportados correctamente.
• Solicita un aumento de límite o migración a una tarjeta tradicional si tu puntaje ha mejorado.