¿Para quién es ideal una tarjeta de crédito garantizada?

Antes de identificar a los usuarios ideales, es importante entender qué es una tarjeta de crédito garantizada. Este tipo de tarjeta funciona de manera similar a una tarjeta de crédito tradicional, pero requiere un depósito de seguridad que suele ser igual al límite de crédito asignado. Por ejemplo, si depositas 500 soles, ese será tu límite de crédito.

El depósito actúa como una garantía para el emisor de la tarjeta en caso de que el titular no pueda cumplir con los pagos. Esto reduce el riesgo para la institución financiera y permite que personas con historial crediticio limitado o negativo puedan acceder a una línea de crédito. ¿Para quién es ideal este tipo de tarjeta? 

Las personas más beneficiadas por las tarjetas garantizadas son aquellas que no tienen historial crediticio. Esto incluye a:

• Jóvenes universitarios o recién graduados que están comenzando su vida financiera.

• Personas que nunca han utilizado productos financieros como préstamos o tarjetas de crédito.

Para estos usuarios, una tarjeta garantizada es una excelente manera de comenzar a construir un historial positivo. Al utilizarla de manera responsable y realizar pagos a tiempo, es posible mejorar el puntaje crediticio y, eventualmente, calificar para tarjetas tradicionales con mejores beneficios.

Facilidad de aprobación: A diferencia de las tarjetas tradicionales, las garantizadas tienen criterios de aprobación más flexibles, lo que las hace accesibles para una mayor cantidad de personas.

• Construcción de crédito: Al utilizar la tarjeta de manera responsable, los pagos se reportan a las agencias de crédito, lo que contribuye a mejorar el puntaje crediticio.

• Posibilidad de migrar a una tarjeta tradicional: Tras un periodo de uso responsable, muchos bancos permiten convertir la tarjeta garantizada en una tarjeta de crédito tradicional y devolver el depósito inicial.

• Educación financiera: Las tarjetas garantizadas son una excelente herramienta para aprender a manejar el crédito y desarrollar buenos hábitos financieros.

Antes de solicitar una tarjeta de crédito garantizada, es importante tener en cuenta algunos aspectos:

• Monto del depósito: Asegúrate de poder cubrir el depósito requerido sin afectar tu presupuesto.

• Comisiones y tarifas: Verifica si la tarjeta incluye cuotas anuales, cargos por mantenimiento u otras tarifas.

• Tasas de interés: Aunque tengas un depósito de seguridad, es fundamental conocer las tasas de interés en caso de que no pagues el saldo completo cada mes.

Las tarjetas de crédito garantizadas son una excelente opción para quienes buscan construir o mejorar su historial crediticio. Si estás considerando obtener una, sigue estos pasos para solicitarla de manera exitosa:

Investiga y compara opciones

Antes de solicitar una tarjeta garantizada, compara las ofertas de diferentes bancos e instituciones financieras. Evalúa aspectos como:

• Tasa de interés: Algunas tarjetas pueden tener tasas más competitivas que otras.
• Comisiones y costos adicionales: Revisa si hay costos de mantenimiento o anualidades.
• Beneficios adicionales: Algunas tarjetas ofrecen recompensas, acceso a plataformas de pago en línea o protección contra fraudes.

Revisa los requisitos

Aunque las tarjetas garantizadas son más accesibles, cada banco puede tener requisitos específicos, como:

• Ser mayor de edad (18 años o más).
• Presentar un documento de identidad válido.
• Probar ingresos estables, aunque no siempre es obligatorio.
• Realizar un depósito de garantía (que suele ser igual al límite de crédito).

Reúne la documentación necesaria

Prepara los documentos que la entidad financiera podría solicitar, como:

• DNI o pasaporte.
• Comprobantes de ingresos o extractos bancarios.
• Información de contacto actualizada.

Realiza el depósito de garantía

El banco te pedirá un depósito en efectivo que servirá como garantía para la tarjeta. Este depósito suele ser equivalente al límite de crédito de la tarjeta (por ejemplo, si depositas S/1,000, ese será tu límite de crédito). Este dinero se mantiene retenido mientras la tarjeta esté activa.

Completa la solicitud

Puedes solicitar la tarjeta en una sucursal bancaria o, en muchos casos, de forma online. Llena el formulario con tus datos personales, adjunta la documentación solicitada y realiza el depósito de garantía.

Espera la aprobación y recepción de la tarjeta

Una vez enviada la solicitud, el banco evaluará la información. El proceso de aprobación suele ser rápido, y en pocos días recibirás tu tarjeta física o la confirmación para recogerla.

Activa y comienza a usar tu tarjeta

Cuando recibas la tarjeta, sigue las instrucciones del banco para activarla. Úsala de manera responsable, realizando pagos a tiempo para comenzar a construir tu historial crediticio.